viernes, 30 de octubre de 2009

Final Alternativo

Me dijeron que hay muchas lagrimas en este Blog voy a darle un respiro a los protagonistas de la ultima historia, aca va un final alternativo.


..... Sacó unos viejos anillos del bolsillo de su saco, tomo su mano y besándola dulcemente lo acomodó lo mejor que pudo, ella con lagrimas en los ojos hizo lo propio, no hubo palabras, no hicieron falta.


La historia de Romeo y Julieta no volvería a repetirse, esa mañana en el geriátrico las camas aparecieron vacías, solo faltaban algunas prendas básicas, remedios y algo de comida, pero Ismael y Sara habían desaparecido.

Mientras Montescos y Capuletos se echaban culpas compartidas, Marisa la enfermera del Turno Noche sigilosamente desaparecía de la vista de todos esbozando una sutil sonrisa.

Cuentan entre las enfermeras del Geriátrico, que Ismael y Sarita se fueron ayudados por Marisa y por el Cura Párroco a una casa de retiro en las sierras de Córdoba, lejos de todo, donde cada día viven su amor, a la vista de todos, al abrigo de Dios.



jueves, 29 de octubre de 2009

Prohibidos


El hastío a lo cotidiano y la presión familiar los había embarcado en una historia de amor secreta, a puertas cerradas, donde nada tenia que ver con los valores morales o la legalidad reinante, los estándares de vida y clases sociales estaban totalmente fuera de su visión.

Se veían siempre en distintos lugares, desapareciendo del universo y hundiéndose en una profunda galaxia solo para dos.

Se miraban, sin tocarse pero calentando el lugar de la cama que les tocaba compartir, jugaban a irse, sin dejar que sus dedos se desprendieran del todo, cuidando sus heridas, tapando los huecos de sus almas.

El mundo los había condenado a un juego de Montescos y Capuletos donde todo conspiraba en contra de ellos y ellos, en contra de todos.

Desarmándose a besos, armaban historias, deshaciendo caminos andaban juntos, cóncavos y convexos se unían para amarse una y otra vez, a veces de manera muy fugas, a veces días completos, si la ocasión lo permitía.

Sacó unos viejos anillos del bolsillo de su saco, tomo su mano y besandola dulcemente lo acomodó lo mejor que pudo, ella con lagrimas en los ojos hizo lo propio, no hubo palabras, no hicieron falta.


La historia de Romeo y Julieta volvía a repetirse pero esta ves no hubo equivocación, esa mañana en el geriátrico los encontraron a los dos, abrazados en la cama que los abrigo por ultima vez, por ultima vez desaparecieron del universo, mientras Montescos y Capuletos se echaban culpas compartidas.

Ya no tendrían que esconderse de la vergüenza de sus hijos, de las risas de sus nietos ni de sus dolidos cuerpos.

Desaparecieron del universo hundiéndose en una profunda galaxia solo para dos.

lunes, 26 de octubre de 2009

Carta Nº 15


Querida hija:
        Te escribo estas líneas, por que es mi mayor deseo estar allí,  con vos, en este día tan especial. Se que no se puede, se que es mi culpa que estemos separados, me es imposible cambiar las cosas y esa es mi mayor condena, saber que debí pensar en vos y no segarme con el odio y la venganza es mi tortura.

Esa tarde después del trabajo, me demoré unos minutos de mas para terminar ese informe que tanto me había costado. Cansado del trajín, retome el rumbo a casa, algo molesto por el contratiempo pero contento por saber que vos y a tu mamá estaban esperándome.

Encontré la puerta abierta y algunas cosas rotas en el piso, mi corazón bombeó toda la sangre de golpe y salí disparado hacia tu cuarto, te busque instintivamente en la cuna, estabas dormida, sana, ajena, corrí en busca de tu madre, pero…. no llegue a tiempo, abrase su cuerpo buscando su aliento, sus latidos, pero era tarde, la locura se apoderó de mi,  no podía pensar en nada, como un loco hurgue el ropero en busca del revolver del abuelo, salte los vidrios destrozados de la puerta del patio y pude ver la figura de aquel que nos había arrebatado la vida de tu madre, te juro hija que no pude pensar en otra cosa, el odio me segó por completo, ese odio llenó mis venas y me dio las fuerzas para correr, saltar la pared y  alcanzar al maldito cobarde que nos quitó la vida de tu madre.

Lo tuve en mis manos, lo miré directamente a los ojos, quería que viera la locura en los míos, no podía parar de pegarle, no me bastaba verle la cara destrozada, mis manos insensibles al dolor descargaban mi desesperación, apoye el revolver en su cabeza y una tras otra la balas vengaban mi perdida, recuerdo sentir la adrenalina y el placer que me daba limpiarme la sangre en mis manos, recuerdo que reí.
De repente la imagen de tu madre en el suelo volvió a mi cabeza, me dejé caer y el desconsuelo se apoderó de mi corazón y lloré como nunca lo había hecho.
Después vinieron las sirenas, el proceso, el castigo.

Hoy cumples 15 años, no podré estar ahí para abrazarte ni darte tu regalo, pero quiero en estas líneas dejarte un poquito del todo el amor que te tengo.
Se que no pude estar cuando me necesitaste, que han pasado todos estos años siendo un padre ausente, nunca tuviste mi abrazo, nunca te conté un cuento al dormir ni te felicite cuando pasaste de grado.
Podría haberte acompañado a comprar el vestido, poner cara de malo al verte con algo escotado o demasiado corto, montar guardia para que ese “fulanito” no se pase de vivo, esperar ansioso el momento del vals y rogar a Dios no pisarte mas de 10 veces.

Te pido perdón hija por no haber pensado en vos, por mi egoísmo, por mi odio, por que aposté a la muerte en lugar de cuidar la vida. Debería estar a tu lado y no entre rejas, por todo eso te pido perdón.

Miro las estrellas y te imagino con tu vestido de noche, toda una mujer y me duele.

Hoy cumples 15 años, no podré estar ahí para abrazarte ….

viernes, 23 de octubre de 2009

De amor y de sombras....

Se que suena a Isabel Allende pero esta es otra historia....


Candela tenia 17 años y estaba terminando la secundaria, su principal objetivo era estudiar y ser abogada, Marcos cursaba el segundo año del colegio y estaba loco por la figura de ella, su pelo negro cayendo sobre su cintura, la sonrisa franca, el andar felino, todo en ella generaba las mil y una fantasía en la mente de el.

Marquito como todos lo llamaban era un pibe alegre, muy entrador, se desenvolvía muy bien en cualquier situación, tanto entre sus pares como entre los profesores, no era un alumno descollante pero nunca le costo demasiado, cuando los chicos de Quinto comensaron a organizar la fiesta de fin de curso Marquito no pudo estar ausente, sus locas ideas y sus ganas de hacer siempre algo nuevo inspiraba a los demás, pero por sobre todas las cosas le permitía estar cerca de Candela, verla reír con cada chiste, acariciar de tanto en tanto su pelo y sentir como ella lo abrazaba considerándolo la mascota del grupo.

La gran noche estaba en su punto mas alto, todos bailando, expresando la alegría y el descontrol que supone abandonar la secundaria, en un momento Marcos salio al gran balcón de la vieja casona, se sentó con las piernas colgando al vació mirando hacia la plaza, pensando en ella, en la imposibilidad de seguirla, de perderla en los caminos que la vida proponía, sabia que era demasiado chico como para que se fijara en el, por eso nunca atino a nada.
Sumido en sus pensamientos no advirtió que Candela se arrimo despacito y sentándose a su lado le regalo una hermosa y amplia sonrisa.

.- Que haces acá solito???, la fiesta no es fiesta si no estas adentro, dijo ella.
.- Nada.... ya entro, solo salí a tomar aire..... esta tan linda la noche .....
.- Si es verdad no podía haber sido mejor, todo esta donde debería, nos salio todo redondito
.- Vas a venir a visitarme de tanto en tanto al cole ?
.- Claro tonto!!! y cuando vos llegues a quinto quiero verte egresar, siempre fuiste parte nuestra.

Se quedo mirando a la nada y ella advirtió por un instante un dejo de tristeza es sus ojos, entonces le dijo:

.- Marquito vos sabes que te queremos mucho y que podes contar conmigo si necesitas algo no ?
.- Si Cande, gracias, pero ...

Ella lo rodeo con su brazo y lo apretó contra su cuerpo, de repente las luces de la ciudad se apagaron quedo todo a oscuras, mientras todos trataban de ordenar el descontrol, buscando inútilmente la falla eléctrica, sus ojos se cruzaron, sus pensamientos también, ella sintió como el corazón de Marcos se le salía con cada latido y sin dejar de abrazarlo se acerco a su rostro y le regalo un beso, primero muy tímido, después muy cálido, sus labios se buscaron una y otra vez, pequeñas descargas eléctricas recorrían sus cuerpos como si toda la energía de la ciudad se concentrada en cada rose, en cada caricia en cada beso y la oscuridad, cómplice y testigo, conspiro para que ambos se olvidaran de todo y de todos.

No pudieron saber o no quisieron saber cuanto duro el apagón pero al volver la luz, los encontró de la mano, mirando a la nada y sin decir palabra alguna estuvieron un largo rato, ninguno de los dos atinaba a decir nada, cualquier cosa podría haber roto ese mágico momento, al final cruzaron sus miradas nuevamente, esta vez se regalaron una mutua sonrisa y fueron con el resto del grupo a bailar y disfrutar el resto de la noche.

Marcos no volvió a ver a Candela, pero hoy guarda en su memoria el momento preciso de aquel beso, la sensación de estar suspendido en el aire, ingrávido, el calor de sus labios, el brillo de sus negros ojos, la suavidad de su pelo y la oscuridad de aquella noche de Diciembre, lejos la mejor noche de toda su adolescencia.



Escarbado del baúl de Vosootehace.

martes, 20 de octubre de 2009

Naturaleza


Como todos los viernes se encontraron en el viejo Pub, ella estaba hermosa, su piel blanca y sus largas piernas la hacían parecerse a una muñeca Barbie, contemplar su andar era el preludio al paraiso

El siempre la vio como la imagen viva de su mujer ideal, como si el gran hacedor la hubiera creado en porcelana y rubi, para él, solo para él.

Hacia ya un tiempo que el se veía demacrado, muy pálido, había perdido su porte de jugador atlético y vigoroso que ella había conocido hacía unos meses atrás, pero fiel a su promesa de no dejarla nunca, se encontraban cada viernes a la misma hora y en el mismo lugar.

Se juraron amor eterno y sus noches eran todas mágicas e irrepetibles, casi como un cuento de hadas, flores, collares, perfumes siempre la esperaban para hacerla sentir, agasajada, amada, pretendida.
Sus palabras suaves y llenas de amor llenaban su alma y su corazón.

Esa noche, entre risas y juegos en la mesa de siempre, ella le pidió salir a caminar, caminar en el parque, entre los árboles, lejos de las luces artificiales, al abrigo de las estrellas y de la luna.
No pudo negarse, su pálida piel estirada y sus largos brazos la rodearon, cuidándola de cualquier amenaza.

Disfrutaron del paseo, de las estrellas, del rocío, de la madrugada, ella bailaba un vals imaginario, él la miraba deseándola cada vez mas, de repente y entre giros se enfrentaron cara a cara, el sonrío, la miró directamente a los ojos y la beso profundamente.
Se dejaron caer sobre la grana besándose suavemente, amándose en silencio.


Algo pasó, él no pudo controlar más sus ansias de sed, su instinto de cazador le jugó una mala pasada, sin pensarlo hundió sus afilados colmillos en la yugular de su amada, en una comunión de seducción y sangre, bebió, bebió sin parar, alimentando su cuerpo dolido por la abstinencia.

Ella, simplemente se entregó a su ejecutor, sabiendo que no tenia alternativa o tal vez por que lo amo sin límites, una vez mas el escorpión  clavaba su aguijón en la rana, por que esa era su naturaleza.


Sus latidos se hicieron cada vez mas imperceptibles. Saciar su sed lo llevó a consumir hasta la última gota de vida que ella logró regalarle.
En sus brazos el cuerpo inerte, la sangre en su boca, el dolor en su interior.

Lo había hecho de nuevo, pero esta vez, fue a ella, ella que fue creada solo para él, ella que lo amó hasta la muerte. Un dolor desgarrador arqueo su cuerpo y un alarido recorrió las calles del pueblo.

Su maldición había caído una vez más lo condenaba a una inmortalidad llena de soledad, desplegó sus alas y desapareció en la oscuridad de la noche, como un cobarde, como el ladrón de almas que era, dejando dos cuerpos sin vida, el de su amada y el suyo propio.

Los titulares de los diarios acusaban una escueta explicación policial, el asesino serial había vuelto a sus andanzas después de largos meses de tranquilidad, ni pruebas, ni pistas solo la incertidumbre de no saber cuando será el próximo ataque.

lunes, 19 de octubre de 2009

Palabras sueltas 1 - Amor


Camino, busco, encuentro,
Picardía, sonrisas, besos

Recorro, disfruto, juego
Toques, electricidad, sueños

Curvas, valles, montañas
Vértigo, tiempo, respiro

Silueta, oscuridad, trasluz
Sabor, ansiedad, calma

Rose, calor, escalofríos
Sudor, gemidos, deseos

Unión, suavidad, placer
Susurros, sonrisas, movimiento

Locura, desenfreno, pasión
olvido, espacio, aliento


Figuras, noche, flash
Tensión, cielo, paraíso

Agitación, latidos, distensión
Susurros, sonrisas, complicidad

Abrazo, calor, amor

miércoles, 7 de octubre de 2009

Orgullo


Ahora resulta que te vas ……
No te bastó verme tirado en un ricon, llorando en silencio
mendigando cariño, una mirada, una caricia
Tu locura no tuvo limites, sin embargo yo sigo aquí,
amándote como siempre, incondicionalmente, pero estas ciega.

No importa que ya no me mires como hace algunos años.
No importa que salgas de noche en busca de amor.
No me importa nada....

Quisiera volver a compartir la cena acurrucados en el sillón del living
ver una película mientras llueve, acariciarnos,
sentir el calor de tu piel, tu perfume, tu aliento.
y que vos sientas que yo siempre estoy para ti.

Pero ahora resulta que te vas....
que encontraste un verdadero amor
que decidís abandonarme a mi suerte olvidando todo lo compartido
que ya no te es suficiente y que alguien mas ocupa tus corazón.

Pero uno tiene su orgullo sabes
Uno también tiene sentimientos aunque me lo niegues en la cara.
No puedo permitirte que me ignores de esa manera
He decidido irme yo!
Espero sinceramente que ese hombre te haga feliz.












                    Tu gato tomy

P.D: El almohadón y el plato de la leche te lo podes quedar

martes, 6 de octubre de 2009

Estamos agradecidos!!


El Flaco, le esta agradecido a TODOS los que de alguna u otra manera colaboraron con la campaña para recaudar fondos para que Santiago pudiera viajar a China y tuviera al menos una oportunidad de mejorar su calidad de vida.

Les cuento que se junto el dinero que se necesitaba y el Santi viaja el 09/10/2009 rumbo a Oriente, le esperan 2 meses de tratamiento y la gran esperanza que eso le ayude.

De gotitas esta hecho el Océano y créanme cuando les digo que si algo no han podido socabar en los argentinos es nuestro sentido de la solidaridad, de nuevo gracias a todos en nombre de Santiago, de Silvana su mamá y del mio propio, solounborrador y vosootehace.blogspot.com dan por cumplida su pequeña mision, seguramente despues vendran otras.

viernes, 2 de octubre de 2009

A escondidas.


Hoy me me acomode lo mejor que pude para que no lograra verme, y como un lobo al acecho la esperé.

El sol, reflejaba sus rayos sobre el agua de la pileta pero cuando ella apareció, el mismo sol sintió vergüenza de tanta belleza y se sonrojó.

Le calculaba unos 15 años alta, piernas muy largas, llevaba puesta una bikini muy chiquita que dejaba ver todo lo que yo hubiera deseado en ese momento, de cabellera negra, lacia, hasta la cintura, su caminar no era de este mundo, parecía flotar en el aire ó al menos eso creia en ese momento.

La habia visto cada dia de estas vacaciones en Pinamar, no iba a la playa, siempre se quedaba en la tranquilidad del hotel y yo hacia lo mismo para esperar su aparición en escena.

Dios!!!! que hermosa criatura, era un hada, un ángel, quería acercarme a ella, pero la diferencia de edad me abrumaba, que iba a pensar de mi.

Un movimiento desafortunado alerto su conciencia y cruzamos miradas, ella me regalo una sonrisa coqueta y complice, yo creí morir de amor, estaba en el paraíso, dejo caer su tallón y comenzó a caminar hacia mi, el corazón saltaba fuera de mi pecho, ese momento era único, ella, yo, el sol, su sonrisa……hasta que una voz quebró toda la magia de aquel inigualable momento….



.-Carlitoooooooossss bajate de ese árbol querés!!! Y venia a tomar la leche !!.


Como una tromba baje del árbol, corrí dejando todo atrás antes que mi mamá se enojara, no era cosa que me dejara sin ver los dibujitos, no volví al árbol y el resto de las vacaciones fui a jugar a la playa para evitar verla otra vez.
Las cosas que uno tiene que hacer a los 7 años para lograr tener cierto decoro.

jueves, 1 de octubre de 2009

El Viejo

Revolviendo los escombros del viejo "Vo so o te hace" me encontre con este cuento, y tengo que decirles que es uno de los que mas quiero, voy a ponerlo de nuevo, sepan disculparme, pero no quiero dejarlo en un rincon.


Hurgaba la tierra con sus dedos aireandola, extrayendo brotes de maleza, su pequeña huerta era algo que lo ayudaba a no perder el juicio y centrarse en una tarea por hacer. Desde que su esposa falleció sus hijos no lo visitaban tan a menudo, mas bien no lo visitaban, el sabia por que, pero aun así mostraba un falso desinterés en el tema.

Las horas pasaban y los días con ellas, las semanas se hicieron años y los años acrecentaron su dureza, el sol y el agua eran los únicos en acariciar su rostro y una vieja radio su única compañía, la vida le había pasado factura por tantos años desperdiciados, estaba solo, pero el se las había arreglado para que eso pasara desapercibido, internamente sabía que no dio el amor que debía, no vivió la vida solo se limito a transitarla, a soportarla, sin encontrar nunca algo que moviera su ser.

Se había casado ya siendo mayor, aquella mujer se había enamorado sin que él se lo propusiera, nunca la cortejo, su rudeza impedía demostrar amor, sin embargo ella se enamoro, se casaron solo por que la costumbre así lo determinaba y sus dos hijos nacieron casi por el compromiso de que su simiente dejara alguna huella en la tierra.
Su esposa, siempre fiel, siempre a su lado, había llevado el hogar adelante, criado y educado a sus hijos quienes a la primera oportunidad volaron del nido haciendo una nueva vida lejos de aquel ser odioso y frío que era su padre, sin embargo ella seguía a su lado, cuidándolo, en un monologo de amor interminable.
Por fin Dios se había apiadado de ella y una tibia tarde de otoño la rescato de su calvario.
La vida indudablemente le estaba pasando factura por todo eso.

La primavera, como hacia muchos años, se estaba expresando en millones de colores, aromas y sabores, la huerta había dado todos sus frutos a la máxima expresión, la tierra generosa y fértil otorgó todo su poder y los elementos se habían encargado de llevar todo lo necesario para que ese milagro ocurriera.
El viejo, como todos lo llamaban ni cuenta se había dado, lo mismo le daba salir a cosechar los frutos como arar la tierra.
Esa tarde al caer el sol algo pasó, el Viejo salio de su escondrijo y recorrió la huerta como todos los días, pero algo paso, de repente el miro hacia el cielo, inspiró profundo el aire puro del campo, relajo sus músculos y soltó un suspiro largo y dolido, se sentó en la vieja silla undió sus codos en las rodillas y cubrió su rostro con las manos, dejando rodar primero una lágrima, miro de nuevo el cielo, después muchas mas siguieron el camino de aquella pionera y por fin un llanto de niño inundó sus manos.

Sabia que era tarde para pedir perdón, para recuperar el tiempo, para dar el amor que no dio, para buscar a esa mujer, la única que fue capas de amarlo en silencio, aquella que había perdido su juventud y su vida por él, era tarde para recuperar la sonrisa de sus hijos, para vivir. Pidió perdón por todo eso, pidió perdón a la vida, a Dios, a su mujer, a sus hijos, el llanto se fue secando ya no tenia mas lágrimas que entregar pero su corazón estaba latiendo, por primera vez en muchisimos años su corazón latía movido por sentimientos, miro su huerta, los colores por fin asomaron a sus ojos, probo sus frutos y como un mendigo hambriento comió y bebió de esos sabores, olio cada hoja, cada flor.
La noche se apodero del campo y con ella los colores volvieron a dormir.
Tomó la vieja silla, entro despacio, con paso cansado se recosto sin desvestirse y se durmió con la única foto de su familia que le quedaba, abrazándola con fuerza como queriendo atrapar todos los momentos perdidos, se durmió de a poco envuelto en las sombras de la noche, en un sueño profundo del cual no despertó.

Ahí estaba ella, esperándolo, enamorada como siempre, se abrazaron, se besaron por primera vez, se amaron por primera vez, por primera ves él la amo, ella extendió su mano y juntos caminaron hacia ese lugar donde la paz los esperaba.

Nadie visitaba al Viejo, fue tal vez por eso que encontraron mucho tiempo después lo que había quedado de su cuerpo marchito sobre su cama, en el pecho agarrada por unos huesos curvos estaba la foto descolorida de su familia, nadie lo lloró, nadie lo extraño.

Cuentan que en las tarde cuando cae el sol, las lágrimas del Viejo riegan el huerto, su arrepentimiento alimenta la tierra y el amor de su mujer le da aroma a los frutos, solo así los que se atreven a pasar por ahí comprenden por que la huerta sigue tan hermosa como siempre.