lunes, 14 de junio de 2010

De la tierra al cielo

Despierto en la noche recitando tu nombre
entre poemas destilados del jugo de mi vida
te abrazo y me pego a ti emulando tu sombra
respirando tu aire, sonriendo tus sueños de alcoba

Mis labios recorren la silueta de tu cuello
mis manos registran palmo a palmo tu alma
sin querer entre tu pelo enredo mi anhelo
y mi deseo se escapa entre el satén de las sabanas

Me hundo buscando el placer de amarte
en tu geografía soy viajero, en tu horizonte el mar
conozco la bella manera que tienes de guiarme
y en tus costas dejo mis naves encallar.

como magia divina me elevo en el universo
miles de estrellas fugases estallan sin cesar
no lo toco por que somos cielo,
lentamente y en silencio desciendo
y en tu oído vuelvo tu nombre a recitar.

jueves, 10 de junio de 2010

Alfa y Omega

Me viste te vi, nos vieron
transparentes desaparecimos juntos
para no tener que volver a encontrarnos.
Transparentes recorrimos cielos de tres soles,
mares de color púrpura, acantilados de algodón,
campos celestes con flores de papel crepe,
para después suspendernos en el tiempo y en el espacio
alejándonos a nuestro mundo de playas de brillantina
mares de te de manzana, selvas con caballos de madera y crayón.
Nos creyeron locos y trataron de despertarnos
firmes unidos y abrazados resistimos los embates de la realidad
el asedio de la rutina, le vigilia del día a día,
finalmente desistieron de su vana e inútil batalla
gloriosos como siempre, alzamos nuestras copas de azúcar
Y brindamos descorchando botellas de licor de rosas,
danzamos junto a las estrellas estrechando lazos lunares,
por fin exhaustos nos desintegramos en una supernova de amor.
Nuestra fina lluvia de pequeños cristales cayó sobre la ciudad
contagiando con la leve locura de vivir un sueño compartido
a unos pocos que se animaron a caminar bajo ella,
solo a unos pocos locos, que transparentes, desaparecieron juntos
para no tener que volverse a encontrar y fuimos alfa y seremos omega,
por que la rueda vuelve a girar una vez mas.

martes, 8 de junio de 2010

Como aquel rayo

Mirando el cielo estaba yo, solo, expectante
esperando el milagro que pudiera rescatarme.
igual que aquel rayo llegaste a mi vida
Impetuosa, refulgente, Asombrosamente única.

Como aquel rayo copaste mis sentidos
atónito, indefenso y sin abrigo
quede a tu merced, te metiste en mi
Y en ti en un instante, quede fundido.

Como aquel rayo me inundaste de luz
de calor, de color, de energía
me hiciste tuyo por primera vez
Y yo … yo te hice mía.

Pero igual que aquel rayo te fuiste de repente
de la luz solo sombras, del sonido solo el eco
Tizones fríos de aquel dorado fuego
Expectante miro el cielo, miro el cielo y espero.